Las aguas bajan, pero la situación sigue complicada con varios poblados aislados
Los parajes del sur de Rincón de Vences, en Lomas de Vallejos, continúan incomunicados salvo por su acceso, la ruta provincial Nº 101, enripiada hace unos años.
El tiempo dio una tregua y los organismos provinciales, con apoyatura del Ejército, continúan llegando a los poblados rurales que fueron seriamente afectados por las intensas lluvias registradas desde comienzos de enero. Con ese panorama, se prevé para hoy un frente de tormenta en toda la región.
Las aguas bajan, en muchos casos en forma acelerada, pero sigue manteniendo a varias familias rurales fuera de los ejidos de sus respectivos parajes. Uno de esos casos es el de Rincón de Vences, que hacia el sur, continúa con caminos anegados y vecinos aislados.
Bruno Lovinson, subdirector de Defensa Civil de la Provincia, comentó que ayer visitó ese poblador de jurisdicción de Lomas de Vallejos, en el departamento General Paz, donde, a pesar de que el agua baja, el panorama “sigue siendo muy complejo” hacia el sur en su vinculación con Empedrado Limpio y Ramones. Por tierra, solo se pueda acceder a Vences desde la ruta provincial Nº 101 en su intersección con la RP Nº 5, que, con 8 kilómetros de ripio, llega hasta la capilla en la entrada del pueblo.
Una comitiva provincial también llegó ayer hasta San Isidro, en el sur del departamento Goya, donde brindó asistencia sanitaria y logística durante todo el día.
El equipo del Ministerio de Salud Pública realizó en simultáneo distintas intervenciones para dar asistencia sanitaria a las familias afectadas por las inundaciones, con operativos integrales en los parajes Santa Rita y Pago Redondo, a 50 y 70 kilómetros, respectivamente, al sur de la ciudad de Goya y en las zonas de San Isidro y San Roque.
El director de Operativos Sanitarios de la Provincia, Eduardo Farizano, indicó: “En los dos operativos fuimos con médicos y, entre los dos parajes, se realizaron 148 atenciones, se repartieron módulos de alimentos, medicamentos y leche”. “Fue un trabajo articulado entre Salud Pública, el hospital Camilo Muniagurria, la Municipalidad de Goya y el Instituto Provincial del Tabaco”, agregó.
Además, otro equipo de Salud Pública realizó operativos en San Roque, en el paraje Guastavino. En el lugar se brindaron atenciones médicas, vacunación, entrega de módulos alimentarios, agua mineral, repelentes y leche. Trabajos similares se realizan también en Concepción.
Paso Tala sigue complicado
Del relevamiento realizado a inicios de semana en jurisdicción de Perugorría, departamento de Curuzú Cuatiá, Lovinson manifestó que los pobladores de Palmita “ya volvieron a sus casas”; en tanto que en Paso Tala, a pesar de que el agua “ya bajó un metro”, la situación sigue siendo “complicada”. Las recorridas también incluyeron a poblados de los departamentos de Mburucuyá y Concepción, una de las más afectadas por el exceso hídrico, y San Luis del Palmar, donde bajó el Riachuelo, lo que permitió la vuelta de algunas familias evacuadas. Solo seis continuaban con sus casas con agua.
