27/04/2024

Un paro sorpresivo de colectivos expuso una interna en la UTA

Trabajadores de una de las empresas de transporte urbano mantiene desde ayer la “interrupción” hasta cobrar deudas salariales. Desde el sindicato cuestionaron la medida. El Municipio multará por la falta del servicio.



La ciudad de Corrientes mostró ayer un escenario distinto porque un paro sorpresivo de colectivos de la empresa ERSA Urbano SA –a cargo del 80% del servicio– afectó a los usuarios que diaramente utilizan el transporte público. La acción fue impulsada por un nutrido grupo de choferes y de otras áreas de la compañía que decidieron extender la suspensión, que comenzó el miércoles de 22 hasta las 3.30 de ayer pero sin el consentimiento de la conducción de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) Corrientes. 
El sector denominado autoconvocados se mostró reacio a la dirigencia de la UTA y realizó la acción en un contexto de negociación entre la empresa y el sindicato, por incumplimientos salariales.
La medida se extendió a las unidades de ERSA del servicio Chaco-Corrientes. Solo circularon unidades de las líneas 110 y 101 de la empresa Miramar.
El paro se inició en las primeras horas de la mañana con los autoconvocados impidiendo la salida de las unidades de los galpones de ERSA. Si bien una minoría intentó prestar servicio no pudieron hacerlo porque prevaleció la decisión de la mayoría de los presentes. Pasadas las 8 se presentaron inspectores de la Subsecretaría de Trabajo de la Provincia para constatar la situación y labrar actas.  Luego el mediador policial Alejandro Bottini logró que se liberara el acceso, pero el paro se extendió durante todo el día. 
Al cierre de esta edición se mantenía la incertidumbre porque no había certezas de que hoy los colectivos circulen normalmente. Es que ayer el vocero de los autoconvocados, Mariano Zacarías,  expresó: “Acá seguiremos y vamos a quedarnos. Este no es un paro es una interrupción hasta que nos paguen”. 


Foto: Radio Dos

En un clima tenso se hizo presente en el lugar el secretario general de la UTA Corrientes, Rubén Suárez, quien les reprochó la iniciativa y  en contacto con la prensa remarcó que “la medida no tiene aval del sindicato”.
Los empleados que rompieron la negociación que realizaba la UTA reclaman prácticamente lo mismo que demandó el sindicato en la conciliación obligatoria, celebrada en Trabajo y que cayó el miércoles. Se trata del pago  del 5,7% correspondiente a septiembre y octubre, que fue acordado en la paritaria de este año y una diferencia conseguida a nivel nacional que se suma al aguinaldo de junio. Pero además, los autoconvocados pusieron sobre el tapete una situación que hasta el momento no había tomado estado público: exigen la regularización de “aproximadamente 130 y 150” empleados que firman un recibo con cierto monto pero perciben una cifra inferior. Y, según el documento difundido, existen otras irregularidades que no habrían sido denunciadas por la conducción de la UTA ante ERSA.
Desde la consignataria del transporte público urbano de la Capital  reconocieron que están en deuda, pero no validaron la forma en que procedieron los trabajadores. El vocero de la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Corrientes (Cetuc), Javier Harfuch, expresó que “la medida carece de legalidad, por eso pedimos el soporte judicial que nos permita garantizar el servicio”.  “Es un servicio público; no puede interrumpirse de esta manera”, afirmó. 

La Municipalidad aplicará multas

Ante este escenario también intervino la Municipalidad de Corrientes. En contacto con la prensa, el secretario de Movilidad Urbana, Jorge Sladek, sostuvo que “es un servicio público no puede interrumpirse de esta manera”.
La medida tuvo la particularidad de ser sorpresiva, es decir que no fue inscripta previamente en la Subsecretaría de Trabajo, como si ocurrió con el paro del martes, que fue comunicado por la UTA con casi una semana de anticipación. 
Esto provocó desazón e impotencia en los usuarios porque no tenían conocimiento del paro. “Vengo de Resistencia porque estudio en la UNNE. Esto es muy triste porque no podemos llegar a la Facultad”, dijo a LT 7 Radio Corrientes ayer a la mañana una estudiante que esperaba en una parada para ir al campus.
 Ante la situación, el Municipio dispuso que los inspectores labren las actas y las multas a ERSA por no brindar el servicio.