26/04/2024

Falleció Diego Armando Maradona


Diego



Lo llora el mundo entero. El, acostumbrado a hacer piruetas en la cancha y en la vida, no pudo gambetear el destino: un paro cardio respiratorio sufrido en la mañana de este miércoles en su casa del barrio San Andrés, en Nordelta se llevó la vida de Diego Armando Maradona.

Diego, El Diez, Dios sobre la tierra para muchos, se descompensó a media mañana y sufrió un paro cardíaco. Hasta el lugar llegaron nueve ambulancias con equipos médicos, pero su castigado cuerpo no resistió y los esfuerzos por reanimarlo fueron en vano.

Innecesario hablar o recordar su carrera deportiva. Fue un genio dentro de la cancha. Argentino Juniors, Boca, Barcelona de España, Napoli de Italia, el Sevilla, Newels de Rosario y obviamente el gran amor de su vida, la Celeste y Blanca de la Selección Nacional fueron las camisetas que supo vestir. En Corrientes también dejó su huella cuando, ya como director técnico, dirigió al Deportivo Mandiyú en su paso por el fútbol grande.

Su vida muchas veces descontrolada dejó huellas en su cuerpo. Así se lo pudo ver públicamente por última vez el día que cumplió 60 años y fue homenajeado por la AFA y Gimnasia y Esgrima de la Plata. Su imagen dolía, apenas se movía y casi que le costaba pronunciar palabras.

Horas después fue internado para ser operado de urgencia por un hematoma subdural. Cirugía en la que volvió a hacer un amague al destino y salió airoso. Su familia, sus hijas especialmente, parecieron recuperar el control sobre su conducta y hasta aislarlo de un entorno que siempre fue muy criticado.

Fue llevado a una casa de Nordelta, en El Tigre bonaerense buscando darle paz y tranquilidad a lo que debía ser una etapa de recuperación muy profunda, no sólo de la cirugía sino también de su “síndrome de abstinencia” como lo había reflejado su médico de cabecera.

En esa etapa estaba el Diego cuando esta mañana el destino lo golpeó como muchas veces lo hicieron recios defensores adversarios, con la diferencia de que esta vez El Diego, El Diez, Dios como muchos lo veían, no se pudo parar. La gambeta no le salió, y la mano de Dios solo se levantó para decir adiós.

Queda recordarlo de la mejor manera, jugando con su novia de toda la vida, la caprichosa numero cinco junto a la que crecio en Villa Fiorito y con la que alcanzó sus mas grandes sueños, como el de salir campeón del mundo como lo contaba aun cuando pibe, cuando era El Pelusa.

El Diego ya es parte importante de la historia del fútbol mundial y un icono mediante el cual en muchos países identifican a la Argentina. Recordemoslo así, gambeteando adversarios, levantando la Copa del Mundo, alegrando y emocionando a todo un país.