Fiebre amarilla: alerta por brote en Brasil
Funcionarios de Salud de la Nación se reunieron en Corrientes con el ministro Ricardo Cardozo, con quien definieron estrategias de inmunización y de control para evitar contagios.
Funcionarios de la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación se reunieron con el titular de la cartera sanitaria provincial, Ricardo Cardozo, con quien coordinaron estrategias de control y prevención de la fiebre amarilla, ante la posible aparición de ese virus por la circulación en países vecinos.
Participaron del encuentro los directores de Inmunizaciones de la Nación, Cristian Biscayart, y de Epidemiología y Análisis de Situación de Salud, Patricia Angeleri. Por Corrientes, además del titular de Salud Pública, estuvo el director general de Epidemiología, Gustavo Fernández.
“Nos reunimos con funcionarios de las áreas de Epidemiología y de Inmunizaciones de la Nación para definir una serie de políticas y estrategias con vistas a mejorar la cobertura de inmunizaciones y la vigilancia en cuanto a la fiebre amarilla, a raíz del brote en Brasil y de la cercanía geográfica con nuestro país”, indicó el ministro Cardozo.
En este contexto, remarcó que “hoy ya están trabajando las áreas técnicas del Ministerio de Salud Pública, de Epidemiología y de Zoonosis, para diseñar las estrategias y llevarlas al terreno y al conocimiento no solamente de la población, sino fundamentalmente de nuestros médicos”.
“Las acciones se llevarán a cabo en toda la provincia, pero fundamentalmente en la zonas de frontera”, agregó.
Explicó que “se coordinaron estrategias de prevención y toda una política comunicacional para que la población se entere de todo lo que es inmunizaciones y vigilancia, y en esto se incluye la posibilidad de detectar monos muertos, que es algo que representa el alerta inicial para determinar la posibilidad de la circulación del virus en nuestro país”.
“Vinimos concretamente a tratar el tema de los planes de contingencia frente a la posibilidad de un evento en relación con la fiebre amarilla, que es un virus que se transmite a través de la picadura de mosquitos y que en la provincias del noreste de la Argentina, en Misiones y algunos departamentos de la provincia de Corrientes, tienen la potencialidad de poder tener la presencia ya sea en monos, como en casos de encontrarse el virus con una persona no vacunada contra la fiebre amarilla, tener la enfermedad”, explicó Biscayart.
“Lo que buscamos es preparar la contingencia para poder articular la vigilancia del virus en mosquitos, en primates y eventualmente la detección precoz de casos en humanos, para el mejor manejo posible”, agregó el funcionario nacional.
