25/04/2024

​Monte Caseros: la familia que encontró a la beba quiere adoptarla

El matrimonio en cuya casa fue abandonada la pequeña cree que lo que ocurrió “es cosa del destino”. Fue “enviada por Dios a nuestras manos para que la cuidemos”, dice.



Gustavo Tardito y su esposa quieren adoptar a Milagros, la beba que encontraron ayer a la madrugada abandonada en la puerta de su casa de Monte Caseros, aún con el cordón umbilical. “Esto fue cosa del destino”, dijo Tardito en declaraciones radiales y consideró a la pequeña como “enviada por Dios a nuestras manos, para que la cuidemos”.
Milagros fue encontrada en el domicilio de Tardito, en el barrio Malvinas, envuelta en una manta. “Fue una sorpresa muy grande encontrar en la puerta de casa una bebé recién nacida, con el cordón umbilical y sangrando, nacida a escasos minutos de que llegáramos a casa”, contó.
El matrimonio, que tiene tres hijos, quiere adoptarla. “Dios la puso en nuestras manos, queremos cuidarla. Estamos decididos a cuidar de ella”, dijo en Radio Dos
“Para nosotros, es algo muy shockeante. Todavía no salimos de este shock y sentimientos”, afirmó y detalló que a la beba la encontraron a las 0.15 del domingo. “Estaba bien en la puerta de mi domicilio. No estaba llorando. Cuando la alcé, largó un llantito y un suspiro, la tapé con unas mantitas que tenía y fuimos por asistencia médica”, relató.
A los 10 minutos de haber encontrado a la pequeña, que pesaba 2,800 kilos, “se largó una tormenta de agua, viento y frío. Para Tardito, si ellos regresaban más tarde a la casa, quizá hubieran encontrado a la pequeña ya con “otro cuadro”. Decidieron “volver temprano por casualidad”. 
Milagros se llama así porque la “doctora [Alicia] Monzón”, que estaba de guardia en el Sanatorio Corrientes cuando la llevaron, “eligió el nombre”, contó a  Monte Caseros Online el diácono José Mariani. “Luego de preguntar a policías y enfermeros si estaban de acuerdo con que la beba fuera bautizada fue ella personalmente a la iglesia, nos contó la situación y solicitó que nos acercáramos al lugar para bautizar a la pequeña. Lo hice junto al padre Tato Renato”, agregó.
“Nunca nos sucedió algo así y no dudamos. Llegamos al lugar y, en presencia de todos, bautizamos a la niña”, dijo. 
Tardito es constructor y vende materiales de construcción. Junto con su esposa es María Cecilia, se pasa la mayor parte del día en el sanatorio junto a la pequeña, que está bien de salud.
“Si la adoptamos, nuestra vida seguirá totalmente normal, con una habitante más”, dijo, emocionado, y aseguró que Milagros “no necesita más nada. La gente se acercó, dejó ropa, pañales, leche”.

El mensaje del padre Tato

El padre Tato compartió su experiencia en Facebook, con el post titulado “Una vida llamada milagros”. “En el Día del Niño. Esta madrugada, dejaron delante la puerta de un hogar una caja de cartón. La familia, regresando de una fiesta familiar, se encuentra con esta enorme sorpresa. Dentro de la caja se encontraba una bebé recién parida, aún con el cordón umbilical y llena de sangre.
Llevaron urgente el cuerpecito al Sanatorio Corrientes. Toda la noche un grupito de profesionales estuvo luchando para rescatar la vida de esta personita. La llamaron Milagros. Hoy de mañana estuve celebrando la misa en San Ramón, y mi hermano, el diácono José, me comunica que nos llaman del Sanatorio para bautizar a Milagros.
Llegamos, un frío terrible afuera, y nos encontramos con la doctora Alicia Gladis Monzón y un grupo de enfermeros en la terapia del sanatorio. Todos pendientes de Milagros. Sentí enseguida lo que puede la terrible fuerza de la Vida y el Amor. En la incubadora me encuentro con un bebé hermoso, radiante de salud. Su carita reflejaba paz, hasta una sonrisa nos regaló.
Con José y estos hermanos celebramos el bautismo de Milagros.
Fue muy emocionante.
José Mariani, diácono permanente, me manda este escrito: ‘Sentí la inocencia y falta de protección de una niña de Belén; viví la providencia y esperanza de una hija de Dios’.
Yo me acordé de tantos argumentos de los pro-muerte. Y no dejaba de contemplar el rostro de Milagros. El amor que se sentía por ella en esa sala. Es verdad, Jesús, la vida vence a la muerte”.

Foto: El bautismo de Milagros./Facebook