30/04/2024

La moda del escaneo de iris llegó a Corrientes: ¿Quién? ¿Para qué? ¿Por qué?



La moda, o negocio, del escaneo del iris, un dato biométrico clave de las personas, llegó a Corrientes. Más precisamente a la ciudad de Esquina donde, desde la semana pasada decenas, de esquinenses forman filas frente a una vivienda donde -a cambio de 50 dólares en criptomonedas vale aclarar-, se dejan escanear el iris. El primer caso se detectó en los últimos días de 2023, en la zona Oeste del Gran Buenos Aires, cuando cientos de personas hicieron horas de cola bajo el sol en la puerta del boliche de Villa Sarmiento, Pinar de Rocha -entre otros lugares-, para también permitir el escaneo del iris de los ojos, a cambio de una remuneración que se puede canjear por pesos en efectivo.
 
Nadie sabe muy bien de que se trata la movida que está impulsada a nivel mundial, en algunos países europeos también se llevó a cabo aunque fue cortada por las autoridades rápidamente, por la empresa Worldcoin, cuya cara visible es Sam Altman, el mismo creador de la inteligencia artificial ChatGPT.
 
La explicación de Worldcoin es que el escaneo es para "garantizar la seguridad de quienes invierten, compran o venden" en el mercado de las criptomonedas, aunque el 99% de quienes se dejan escanear el iris no invierten en ese mercado, y se suman a la movida con el único objetivo de sumar, cada 15 días, 50 dólares en pesos a sus flacos bolsillos.
 
Esquina no fue diferente al aura de oscurantismo que se vivió en el gran Buenos Aires alrededor del tema. Nadie quiere hablar ni explicar nada, y cuando desde programas de televisión se expuso la situación, quienes realizaban cola en la calle para ingresar a una casa donde se realizaba los escaneos, fueron invitados a pasar para que no se detectara desde afuera un movimiento que llamara la atención.


 
De ahí en más, el escaneo continuó, pero con el otorgamiento de turnos para que de esta forma no se formen aglomeraciones que generen curiosidad. Ninguna autoridad, ni municipal ni judicial se ocupó del tema ni avanzó en investigación alguna que permita saber para que se toma datos biométricos tan claves de las personas, ¿quién lo hace? Y también, ¿por qué? ¿De donde salen los recursos para pagar los 50 dólares en criptomonedaas canjeables por pesos a cada uno de los escaneados?
  
Aunque no está del todo claro que hay por detrás de este "negocio de la identidad", la prueba es bastante fácil: hay que bajarse la aplicación de la empresa y luego por medio de un artefacto denominado “orbs” -una esfera plateada digna de Star Wars-, se toma la imagen del iris de cada participante. Todo esto a cambio de una suma de diez monedas de bitcoin, moneda cuyo valor oscila de acuerdo a las oscilaciones del mercado.
  
La diputada por la provincia de Buenos Aires, Romina Braga, fue la primera en ocuparse del tema en el país presentando un proyecto para saber de qué se trata y sobre todo si no se está violando alguna norma de nuestro país.
 
“La fundación WorldCoin hace aproximadamente ya más de un año que está en territorio de Argentina. Nosotros empezamos a ver largas colas en la provincia de Buenos Aires ya a fines del año pasado, y lo que hicimos fue, hace unos meses, presentar un pedido de informe al Poder Ejecutivo, a la Gobernación, para poder tener en claro cuál es la acción que está haciendo el Estado frente a la fiscalización de todo esto. Queremos saber que es el escaneo del iris y qué información se le proporciona a la gente que va” explicó la legisladora.
 
En diálogo con el programa 47M de T5 Satelital, Braga afirmó que “en la provincia de Buenos Aires, gracias a la movida de poner esto un tema en agenda, que es un poco lo que están haciendo ustedes, se permitió poder avanzar en algunas cuestiones que nosotros dudábamos, que es un poco la seguridad de los datos”, aunque aclaró que “ahí hay como una especie de parsimonia por parte de los Ejecutivos que no toman acción”.
 
No obstante, destacó que no existe un vacío legal. “Lo primero es la Ley de la Defensa del Consumidor, que es una ley nacional y esto se encuentra en vigencia y un poco lo que ya se hizo en la provincia de Buenos Aires es denunciar los términos y condiciones de uso y aviso de privacidad, como también el formulario del consentimiento de los datos, por ser un poco excesivo el permiso que se toma la empresa, la fundación, porque algunas cuestiones que se observaron es que se establece como jurisdicción la ley aplicable las Islas Caimán. También, por ejemplo, otra cosa que se pudo averiguar es que las disputas que se puedan resolver en términos de un arbitrio internacional, fíjense, en California, en Estados Unidos. Algunas de estas cosas no están claras y es necesario que cada una de las personas conozca lo mismo.
 
También detalló que su equipo conoció que “cuando uno firma esto se obliga a renunciar al derecho de hacer reclamos colectivos, de que una cantidad de personas se agrupe para poder ir y litigar en contra de algún mal uso, por ejemplo, de la información. Esto recién ahora se está conociendo y por sí también tenemos la ley de datos personales. Hay un anclaje legal, claramente falta, porque, como bien sabemos, la legislación no siempre acompaña el avance de la tecnología, pero tenemos un anclaje”.
 
Respecto al origen de los fondos con los que se les paga a estas personas, Braga considera que “ahí hay una cuestión, que es que no perciben un dinero en pesos argentinos, sino lo que se les da públicamente, lo que hace la fundación WorldCoin, es buscando generar una identidad global, se dan a cambio y pueden ser intercambiadas por dólares y estos, a su vez, cambiados por pesos. Y ese sentido aseguró que “todo este tipo de información también es un poco difusa, porque me imagino que no todo el mundo le debe estar explicando cómo una cosa va hacia la otra, nosotros tenemos nuestras dudas frente a la cantidad de gente que hace la cola, cuanta gente realmente sabe lo que hace a cambio de qué y si eso lo puede monetarizar, y además nosotros tenemos nuestras dudas de por qué monetarizan algo que busca hacer algo altruista. Tenemos muchas dudas y pocas respuestas".
 
DATO CLAVE
 
El iris de una persona es un dato biométrico clave que, incluso, reúne condiciones de seguridad mayores a las de una huella digital. Cada iris posee 256 puntos característicos que nos convierten en individuos irrepetibles. Garantizan la identidad aún más que las huellas digitales, que cuentan con 40 patrones personales.
 
Según la empresa, Worldcoin necesita garantizar que del otro lado hay un humano y no un robot en las transacciones económicas. Si bien aseguran que no retienen datos personales ni copias del iris, no logran explicar cómo impedirían, por ejemplo, que alguien pudiera repetir el proceso sin tener esa información específica.
 
La información biométrica obtenida es inalterable, lo que significa que cederla a una empresa privada expone a los participantes a una extrema vulnerabilidad en términos de privacidad e identidad. Los cálculos estimativos indican que en Argentina más de 360.000 personas ya llevaron a cabo este proceso.


 
Mientras tanto, la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP), autoridad de Aplicación de la Ley 25.326 de Protección de Datos Personales, informó que está llevando adelante una investigación sobre el tratamiento de datos personales que realiza la Fundación Worldcoin en Argentina, con el objetivo de verificar las medidas de seguridad adoptadas en el marco de la protección de la privacidad de las y los usuarios de la aplicación digital.
 
Luego de tomar la información de los voluntarios, la empresa les ofrece un bono que luego pueden canjear. Justamente, en los últimos días por ejemplo en las inmediaciones de la plaza Sarmiento de Ramos Mejía, en Buenos Aires, aparecieron carteles en los que compradores desconocidos publicaban un número de celular y ofrecían: “Compro Worldcoin. Estamos cerca. Pago más”. Pagaban 32.500 pesos. El negocio llegó incluso a las redes sociales y, por ejemplo, en Facebook ya se están creando decenas de grupos de compra y venta de WorldCoin.