05/12/2024

​José Peña y María Noguera creen que Laudelina y Macarena saben que pasó con Loan



María Noguera y José Peña, la mamá y el papá de Loan Danilo Peña desaparecido el 13 de junio pasado en la localidad de 9 de Julio, creen que Laudelina Peña, hermana de José presa en un penal de Mendoza, y una prima de Loan, Macarena, saben que sucedió con el nene sobre el que se tejieron innumerables versiones, aunque ninguna sirvió siquiera como pista para dar con su paradero.
 
Loan desapareció el 13 de junio pasado en el Paraje Algarrobal, a pocos kilómetros del pueblo de 9 de Julio, tras participar junto a su padre y otros familiares de un almuerzo en honor a San Antonio en el campo de Catalina Peña, su abuela y madre de José. SI bien primero se presentó como un chico perdido en el campo, la causa fue virando después a una sustracción de menor con motivo de trata, algo que nunca se pudo probar en lo más mínimo, y hasta se barajó, y baraja aún, la posibilidad de un accidente o algún otro hecho de violencia que pudo haber terminado con la vida del nene.
 
Por su desaparición esta detenidos en distintos penales federales de la Argentina seis de las personas que participaron del almuerzo, aunque la situación judicial de ninguno de ellos, a cinco meses de que todo comenzara aún no pudo ser resuelta por la Justicia Federal que lleva adelante la investigación.
 
Los que están presos son Laudelina Peña de 46 años, tía de Loan, junto a su pareja, Antonio Bernardino Benítez de 38. También, dos matrimonios: Daniel “Fierrito” Ramírez de 49 y Mónica del Carmen Millapi de 36, más el ex capitán de navío Carlos Guido Pérez de 63 y la ex funcionaria municipal María Victoria Caillava de 53. Además también está en prisión el ex comisario de 9 de Julio, Walter Adrián Maciel, de 44 años, acusado de encubrimiento de no se sabe muy bien que cosa.
 
Pasados los cinco meses de investigación en primera instancia en la Justicia Provincial y luego en la Federal, las únicas pistas concretadas halladas son los rastros odoríficos de Loan en los vehículos del matrimonio Pérez – Caillava y una zapatilla del par que tenía puesto Loan el día de su desaparición, enterrada en el barro a orillas de una laguna a 3 kilómetros donde fue vista por última vez. Raro para que un chico que, como cuanta María hoy, “tenía miedo de entrar a la laguna, al barro, a los yuyos y al monte”. A la luz de estos datos y de los testimonios que surgieron entorno al hallazgo, no quedan dudas de que esa zapatilla fue plantada en el lugar. Porqué y por quién es algo que nadie parece querer responder.
 
José y María, de la mano de uno de sus abogados, Juan Pablo Gallego, dieron esta semana una serie de entrevistas a medios de Buenos Aires, ciudad en la que pasan sus días por ahora. Allí contaron que le siguen comprando "cosas" a su hijo  y que hay juguetes y un par de zapatillas nuevas, "que lo están esperando". Pero también muestran cierta incertidumbre cuando afirman que "no sé hasta qué punto vamos a llegar, pero ojalá sepamos pronto algo", y desazón cuando confiesan que “sentimos que ahora quedamos medio solos.
 
José y María ya no ocultan sus sospechas contra sus familiares directos que estaban presentes en el almuerzo en el que desapareció Loan. “Ellos tienen que pagar, aunque sean familia. No me interesa quién fue, yo quiero a Loan y nada más. Queremos a nuestro hijo. Ese día, en un rato me di cuenta de que habían hecho algo, porque estaba ahí” dice hoy José, aunque se niega a tomar contacto con su hermana Laudelina para tratar de indagar sobre el destino de su hijo.
 
“No, porque sé que me va a recibir de malhumor y no me va a decir nada, no se va a poder hablar con ella. Le diría que diga la verdad, que no ande mintiendo. Siempre fue diciendo mentiras, la gente no le cree más. Le diría que diga qué hicieron con él para poder encontrar a Loan” responde cuando lo consultan acerca de si hablaría con su hermana presa en un penal federal de Mendoza.
 
Las sospechas de ambos no se quedan ahí, también apunta a una prima de Loan que estuvo ese 13 de abril en el almuerzo, Macarena Núñez. “Ella también sabe la verdad. En 9 de Julio no la hemos cruzado. María sí se la cruzó” dice José y rápido María apunta: “Yo fui a su casa, pero te mira y no te pone atención. 'Ya te dije tía que yo no sé lo que pasó con Loan, yo no sé nada más', me respondía. Me parece que no le importa nada, pero ella también debe saber algo” contó la mamá de Loan sobre ese encuentro.
 
Gallegó, el otro abogado de la familia es Roberto Méndez, adelantó que presentó un escrito ante la jueza federal de Goya a cargo de la investigación, Cristina Pozzer Penzo, solicitándole que sume a dos fiscales que estén abocados “las 24 horas a la investigación”, al considerar que se trata de "un caso grave", tal vez tratando de frenar el alejamiento de los fiscales de la PROTEX, que ya dejaron trascender que pedirían quedar al margen de la investigación al no hallarse, después de 5 meses de investigación, indicios de un caso de trata de personas.
 
La causa e investigación por la desaparición de Loan Tiene todos los condimentos de una inimaginable historia de terror policial: miles de hectáreas rastrilladas, policías encubridores, fiscales incompetentes, decenas de mentiras, abogados mediáticos oportunistas desesperados por figurar a cualquier precio, periodistas fabuladores en busca de cinco minutos de efímera fama y medios haciéndose la América exponiendo menores, condenando y absolviendo al vaiven de los puntos de rating, charlatanes de feria que coparon los medios porteños con total desparpajo para revolear sin escrúpulos hipótesis o versiones sin el más mínimo sustento que no sea una operación política, errores políticos, decenas de sospechosos y teorías, falsos agentes de la DEA e Interpol, peritos impostores y pericias plagiadas, una millonaria y poco transparente colecta y un sinfín de vanidades. Pero le falta lo más importante, que Loan aparezca.