Una disputa intrafamiliar por una propiedad es una nueva hipótesis en la desaparición de Loan
Cada vez con más fuerza la hipótesis de una interna familiar parece ser la clave que lleve a saber que pasó con Loan Danilo Peña, el nene de 5 años que está desaparecido desde el 13 de junio pasado luego de compartir un almuerzo en la casa de su abuela Catalina, en el paraje Algarrobal de 9 de Julio.
Justamente Catalina. Al cumplirse este viernes 57 días de la desaparición, declaró ante la jueza Federal Cristina Pozzer Penzo durante varias horas durante las cuales contó la interna familiar por el campo de su propiedad, y reveló que “tres hombres” le habrían pedido que mienta ratificando la versión del supuesto accidente que su hija Laudelina, tía de Loan, contara ante la justicia correntina.
También habló de quien es, para ella, el principal sospechoso de hacer desaparecer a Loan, y dijo que Laudelina, “cayó por protegerlo”, aunque señaló a su hija como quien utilizaba su teléfono poniéndola así bajo la lupa como la posible responsable de haber borrado 34 llamadas que se hicieron el 13 de junio mientras buscaban al nene que, aseguraban, se había perdido en el campo.
Catalina, de 86 años, llegó a los tribunales federales de Goya en un patrullero de la Policía Federal Argentina que la buscó desde 9 de Julio. Dos veces ya se había suspendido su declaración. Afuera de los tribunales, una ambulancia aguardaba por su era necesaria algún tipo de atención a la mujer que se mostró sólida y vital, aunque dije padecer un poco de sordera y no comprender algunas preguntas.
Ya lo había dicho ante los medios de comunicación y lo ratificó ante la juez: “tres hombres” le pidieron que “mienta” apoyando la versión del supuesto accidente que Laudelina Peña dio ante el fiscal provincial Gustavo Robineau y en el que Loan habría fallecido atropellado por la camioneta que manejaba el ex capitán de navío Carlos Pérez en compañía de su esposa María Victoria Caillava.
Pero reveló un detalle casi inesperado: uno de esos hombres sería un ciudadano americano que se distinguía por un tatuaje importante. Aunque no dio el nombre de ninguno de los hombres que asegura “la apretaron” para que sostuviera la versión de Laudelina.
La abuela de Loan, durante su declaración reveló también un detalle que hasta ahora no se había puesto sobre la mesa de la investigación y que revela un ocultamiento de un dato más por parte de la ex funcionaria municipal Caillava: que esa tarde María Victoria volvió a El Algarrobal porque había olvidado en el lugar su cartera.
A lo largo de su extensa exposición, Catalina reconoció un parentesco lejano con Caillava, lo cual la mujer no había revelado durante su indagatoria. Y que el domingo anterior al 13 de junio la mayoría de los asistentes habían estado en El Algarrobal comiendo un locro.
La interna familiar
El primer fin de semana que Loan estuvo desaparecido, a Catalina le preguntaron que creía que había pasado, y con mucha firmeza, antes de decir que le dijeron que a su nieto se lo llevó “el Pomberito”, afirmó que para ella “era una venganza por mucha plata”. Su relato ahora ante Pozzer Penzo y los fiscales le pusieron detalles a ese dato que dio hace más de 50 días pero al que pocos le prestaron atención.
Catalina contó que la pelea familiar es entorno al campo donde vive y que su hija Laudelina, junto a su pareja Antonio Bernardino Benítez, el último que se supone vio a Loan, quieren que se venda, algo a lo que José Peña, el padre de Loan, se opone mientras su madre este viva. Los otros hijos de Catalina, también apoyarían la liquidación de esa propiedad.
El campo, de acuerdo al relato de la mujer, fue puesto a nombre de una persona de apellido Rivarola para que “los hijos no se peleen” y por “conflictos con vecinos”, pero ahora estaban por volver a poner a nombre de Catalina, quien relató que “hubo una disputa familiar por el campo” y dio detalles de un conflicto con un vecino por la usurpación de unas 20 hectáreas que finalmente se devolvieron hace dos años.
En el medio se refirió a las discusiones entre sus hijos José, padre de Loan, y Laudelina y amenazas que habrían surgido de esos cruces. “Dejalos mujer, le vamos a dar donde más les duele” habría soltado alguna vez Benítez a Laudelina en medio de una de esas discusiones.
El viernes, Catalina dijo que sospecha que su yerno, Bernardino Antonio Benítez, está vinculado a la sustracción de su nieto Loan, y que Laudelina cayó por cubrirlo.