20/04/2024

El Barcelona de Messi sufrió una paliza histórica ante el Bayern Munich: 8-2



 Fueron 90 minutos lapidarios, de los que se recuerdan toda la vida. Bayern Munich no tuvo piedad con Barcelona y echó al equipo español y a Lionel Messi de la Champions League en los cuartos de final. Lo humilló. Fue goleada por 8-2 en el Estadio da Luz de Lisboa, de Benfica, en una demostración de poderío ofensivo y juego de equipo que hace un tiempo estaba asociado a los catalanes. Sin embargo, son los alemanes los que armaron un festival de goles para extender a 28 sus partidos sin perder y pasar a las semifinales del torneo. En el campo se vio entre ambos conjuntos la misma diferencia que ofrecieron desde el reinicio de los torneos tras la pandemia del coronavirus. De un lado, un Bayern Munich avasallante, ambicioso y goleador. En el otro, un Barcelona terrenal, con pocas ideas y encomendado a las acciones individuales de Messi y a la puntería de Suárez, algo que identificó esta etapa de Quique Setién como DT, envuelto en cortocircuitos con el plantel y rumores de alejamiento. Bayern Munich piensa ahora en el próximo miércoles, cuando se mida con el vencedor del encuentro de cuartos de final que animarán este sábado Manchester City, de Inglaterra, y Olympique Lyon, de Francia. En un inicio de ida y vuelta, Manuel Neuer salvó al Bayern a los 3 minutos al despejar justo cuando Luis Suárez se relamía y en la siguente jugada, Robert Lewandowsi asistió a Thomas Müller y el número 25 no perdonó: 1-0 para los alemanes. Un anticipo de lo que sería el partido. A los 7, otro centro, pero desde la izquierda esta vez, buscaba al delantero uruguayo y se convirtió en el 1-1: David Alaba anotó en contra de su arco al intentar despejar. Tuvo Suárez otra gran chance poco después, que desvió Neuer. Y Messi casi anota en un centro que nadie llegó a cabecear y la pelota terminó impactando contra un palo. No se lamentó Leo, pedía calma. La perderían todos, abrumados por la superioridad. Un mal despeje había permitido el empate parcial de Barcelona, pero Bayern Munich luego no tuvo piedad Un mal despeje había permitido el empate parcial de Barcelona, pero Bayern Munich luego no tuvo piedad Fuente: Reuters Llegando a los 20, el rosarino generó una jugada individual entre las piernas alemanas y Neuer volvió a salvar a su equipo. Y otra vez, la respuesta a una oportunidad perdida fue un gol sufrido: Ivan Perisic remató de zurda y venció la resistencia de Clement Lenglet y Ter-Stegen, que no pudieron cambiar el destino: 2-1 para Bayern. Implacables, los alemanes estiraron la diferencia a 4-1 en dos jugadas casi consecutivas. Primero, Serge Gnabry se mantuvo firme cuando le estaban cometiendo falta y de derecha, por abajo, liquidó a Ter-Stegen para el tercero. Luego, Müller anticipó a Lenglet en un centro de Joshua Kimmich y celebró el cuarto, segundo de su cosecha personal. Los teutones estaban edificando una paliza memorable. En el segundo tiempo, el entrenador Quique Setien cambió el sistema con la inclusión de Antoine Griezmann en lugar de Sergi Roberto. ¿La idea? Acompañar a Messi con dos delanteros. No obstante, los alemanes siguieron manejando el juego con gran velocidad y tuvieron las primeras chances en esa etapa. Lionel Messi tuvo un par de oportunidades en el primer tiempo Lionel Messi tuvo un par de oportunidades en el primer tiempo Fuente: Reuters Suárez le había devuelto algunas esperanzas a los catalanes a los 12 minutos al acortar distancias en el marcador: una buena acción dentro del área, enganchando ante su marcador antes de rematar, se convirtió en el 4-2. Fue una buena asistencia de Jordi Alba. Pero los alemanes se volvieron a enojar. Cinco minutos después, otro mazazo del Bayern. El 5-2 de Kimmich llegó tras una gran acción de Alphonso Davies, que dejó a Nelson Semedo desparramado por el piso con un par de amagos. El lateral la empujo casi debajo del arco luego del centro atrás. Hubo más, para que el sufrimiento de Barcelona no termine: el 6-2 fue el festejo que esperaba Lewandovski, el goleador de la temporada, y Philippe Coutinho ingresó desde el banco ante su ex equipo para un doblete que no gritó por respeto y porque la serie estaba liquidada: fueron el séptimo y el octavo, para sellar el 8-2 definitivo. El polaco Robert Lewandowski lleva 54 tantos en 45 encuentros para el Bayern Munich, que confirmó su hegemonía en el fútbol alemán tras ganar su octava Bundesliga consecutiva y llegó a cinco de las últimas siete semifinales del máximo torneo europeo a nivel de clubes. Luego de su último título de Champions en 2012/13, el equipo alemán jugó la instancia a la que avanzó en 2013/14, 2014/15, 2015/16 y 2017/18, mientras que en 2016/17 fue eliminado en cuartos y en la edición pasada se despidió en octavos. Barcelona y Bayern Munich se enfrentaron nueve veces por Champions League, con seis triunfos para los alemanes, sólo dos para Barcelona y un empate. El dato es que el ganador de las tres anteriores eliminatorias (la última fue con los recordados goles de Messi y su gambeta a Boateng) entre ambos equipos terminó siendo el campeón del torneo. Y allá van los alemanes, listos a aferrarse a esa estadística tanto como al buen juego que los ha llevado hasta esta instancia y los muestra con el cartel de principal candidato al título.