19/04/2024

El robo no fue el motivo del crimen de la jubilada de Saladas

La autopsia reveló que a Ramona Zulma Arce (70) la asesinaron con golpes en la cabeza. En la requisa de la vivienda, hallaron una suma importante de dinero, sus tarjetas bancarias y otros elementos de valor. 



Ramona Zulma Arce (70) fue asesinada con golpes en la cabeza, según se desprende del examen realizado en la autopsia. En la requisa de la vivienda, hallaron una suma importante de dinero, sus tarjetas bancarias y otros elementos de valor. Por el momento, los investigadores descartaron el robo como móvil del crimen. Se desconoce si la víctima contaba con más dinero en la casa. La empleada doméstica sigue siendo la principal sospechosa. No trascendió a la prensa si declaró en el sumario policial ni cuándo lo hará en el Juzgado. El fin de semana no estuvo en el domicilio de la víctima. Concurrió el lunes a realizar sus tareas y esa siesta, cuando una hermana encontró el cadáver, habría manifestado que no advirtió nada que le llamara la atención ni el olor nauseabundo por la descomposición del cuerpo.
Peritos de la Unidad Fiscal de Investigaciones (UFI) realizaron un relevamiento en el inmueble y detectaron con luminol manchas de sangre. El sumario está a cargo de la comisaría de Saladas, con intervención del Juzgado de Instrucción y Correccional de María del Carmen Mareco y la Fiscalía de Osvaldo Ojeda.

Un misterio

Los motivos del asesinato de Arce siguen siendo un misterio. Los investigadores solo tienen conjeturas.
A la vista cuentan con un cadáver y la empleada doméstica como sospechosa. Pero no tienen la evidencia para sostener los cargos de homicidio. No se sabe con qué elemento golpearon en la cabeza a Arce, al menos no trascendió a la prensa ni se supo si en el procedimiento realizado en la casa hallaron el objeto utilizado para el crimen. La última vez que la vieron a Zulma Arce fue el viernes 14, cuando concurrió al banco a cobrar su jubilación y luego habría realizado unas compras. Camino a su domicilio, saludó al pasar a algunos vecinos.
Los que trabajan en el caso tratan de recomponer los últimos momentos de su vida. No hay precisiones que ocurrió entre la tarde-noche del viernes, el sábado 15 y el domingo 16.
Para los forenses, por el estado del cuerpo, hacía unos dos días que estaba muerta. No se hizo un pozo profundo y al parecer lo hicieron tan rápido que dejaron un pie asomándose entre el montículo de tierra, que fue cubierto con un plástico y sobre el que pusieron una chapa, palos y la fijaron con una pileta de cemento que se utiliza para lavar ropas.
Además, derramaron cal sobre el cuerpo.  No se sabe si esa cal estaba en la casa de Arce o quien o quienes cometieron el asesinato la trajeron porque estaban decididos a matarla y enterrarla. 
Cuando su hermana llegó al domicilio, encontró a la doméstica ocupándose de las tareas de la casa. En esos momentos también arribó un hombre que hacía trabajos de jardinería y albañilería en la vivienda.  
La hermana y ese hombre fueron  al patio y sintieron el olor nauseabundo. Fue cuando descubrieron el cuerpo semienterrado.

Examinarán los registros de cámaras de seguridad           

Videos de cámaras de seguridad de particulares, comercios y de la Municipalidad de Saladas  cercanas al domicilio de Zulma Arce fueron incorporados a los materiales a analizar por los investigadores. 
Fuentes judiciales señalaron que la empleada doméstica de doña Arce, de apellido González, se habría retirado de la casa en la noche del viernes 14 y regresó en la mañana del lunes 17 a cumplir con su rutina.
La señora González, de unos 55 años, habría viajado a la ciudad de Corrientes en la noche del viernes. Tenía una llave de la casa de Arce. Cuando se descubrió el cadáver de Arce en el patio de la casa, al arribar la policía y autoridades judiciales se preservó la escena para el trabajo de los peritos. Todo estaba en orden. Se le pidió a la hermana, que habitualmente la visitaba, que revisara las dependencias para determinar si faltaba algo de valor, pero no lo constató. Las fuentes manifestaron que se observó que se había barrido el patio. Llamó la atención que la señora González no se preocupara por la ausencia de Arce cuando llegó a la casa para realizar los quehaceres domésticos ni se molestara por el olor fétido.  Dijo a los policías que cuando llegó la puerta de entrada principal estaba llaveada. Se verificó que no había violencia en ninguna de las aberturas. La víctima era muy solidaria y mantenía un activa relación social. Los investigadores tratan de establecer con quién estuvo, con quiénes se veía frecuentemente, quiénes la visitaban, si tenía alguna deuda y si en esos contactos comentó algo que la preocupaba. Piden que aquellos que escucharon o vieron algo sospechoso que se acerquen al comisaría a brindar su aporte. 

Asesinada y enterrada en el patio de su casa           

La falta de respuestas a llamados y mensajes a su celular motivó que una hermana de Zulma Arce, que también vive en Saladas, se traslade hasta el domicilio situado en Independencia al 500 entre Bolívar y Florida. 
Al llegar, en la siesta del lunes 17, fue atendida por una señora de unos 50 años, que hacía más de 10 días que la contrató Zulma para que ayudara en los quehaceres domésticos. Le preguntó por Zulma y le dijo que había salido.
Doña Zulma, como la conocían en el barrio, vivía sola y alternaba su actividades cotidianas con tareas de enfermería a domicilio o en su casa.
La hermana entró a la vivienda y no advirtió nada extraño o que le llamara la atención. En esos momentos llegó un hombre, que con frecuencia realiza tareas de jardinería y albañilería en la casa. Junto con la hermana de Zulma, se fueron al patio y sintieron un olor  a osamenta. Pensó en algún animal muerto. Pero fijó su mirada hacia el fondo del patio, donde había tierra removida, cubierta en parte con un plástico, donde colocaron encima una chapa y una pileta de  cemento que se usa para lavar ropas. Se estremeció cuando advirtió que entre la tierra removida salía un pie. 
Rápidamente, volvió a la casa y enfrentó a la empleada, quien se mantuvo en silencio. Pidió ayuda a vecinos y llamaron a la policía. Luego llegó la jueza, el fiscal y peritos.
Vecinos dijeron que la vieron el viernes 14 por última vez, día en que fue a cobrar su jubilación. También vieron un auto rojo estacionado frente a la casa.

Extraña coincidencia            

Ramona Zulma Arce nació el 14 de febrero de 1950 y la fecha de su deceso se registró el 14 de febrero de 2020. 
Sus restos fueron velados, con ataúd cerrado, en la sala situada en Sarmiento y Florida, de la ciudad de Saladas.  
A las 10, en la iglesia San José se hizo una misa de cuerpo presente y, posteriormente, el cortejo fúnebre partió hacia el cementerio San Francisco Asís. Familiares, amigos y vecinos acompañaron sus restos y reiteraron sus muestra de dolor.