25/04/2024

Halló a su hermana sepultada en el patio: un pie asomaba en la fosa

Zulma Arce (68) era una jubilada que vivía sola a unas tres cuadras de la plaza. La señora que hacía la limpieza  está presa e incomunicada. La habrían matado a golpes. Vecinos vieron un auto rojo estacionado en la vivienda. 



El hallazgo de una mujer enterrada en el patio de su casa estremeció a la comunidad de Saladas en la tarde de ayer. Apenas se conoció la noticia, las adyacencias del domicilio se llenaron de curiosos al tiempo que policías, autoridades judiciales y peritos empezaron a trabajar en el caso. Una señora,  que hacía la limpieza algunos días de la semana, quedó detenida e incomunicada. La víctima, Zulma Arce (68), vivía sola. La última vez que la vieron fue el viernes. Vecinos dijeron que ese día vieron un vehículo rojo estacionado frente al domicilio. Los restos fueron trasladados a la capital correntina, donde en el Instituto Médico Forense (IMF) realizarán la autopsia para establecer causa y tiempo de la muerte. La habrían asesinado a golpes. 
El sumario está a cargo de la comisaría local con  intervención del Juzgado y la Fiscalía de Instrucción de Saladas.

Sospechas

Ramona Zulma Arce (68) vivía sola en su casa situada por Independencia entre Florida y Bolívar, a unas tres cuadras de la plaza de la ciudad de Saladas.
No tuvo hijos. Su ámbito familiar se componía con sus hermanos, que viven en Saladas, Corrientes y Buenos Aires.
La falta de respuestas a los llamados a su celular y a los mensajes de textos despertó sospecha a una hermana, que en la tarde de ayer decidió ir a visitarla. 
Al llegar a la casa, la recibió una mujer que se encargaba de las tareas de limpieza de la vivienda  concurriendo algunos días de la semana. Había empezado a trabajar hacía más de 10 días.

El macabro hallazgo

Cuando la hermana preguntó por Zulma, la empleada respondió que había salido.
Doña Zulma, como la conocían en el barrio, se dedicaba a realizar tareas de enfermería, entre ellas de poner inyecciones.
Su hermana entró a la casa y recorrió las dependencias. Parecía que todo estaba en orden. Se fue hacia el patio y, al mirar hacia un montículo de tierra removida, advirtió que se asomaba un pie. Quedó paralizada. Rápidamente, buscó ayuda entre el vecindario y llamaron a la policía. En cuestión de minutos se armó un gran revuelo y el frente de domicilio se llenó de curiosos.
El cuerpo estaba semienterrado en una fosa que se hizo en el patio de la casa. Luego, lo cubrieron con una chapa y colocaron encima una pileta de cemento que se usa para lavar ropas.
El calor, la humedad por las recientes lluvias ayudaron a la descomposición del cadáver. 
Los restos fueron retirados hacia al anochecer. Primero trabajaron los peritos y, culminada su tarea, se sacó el cuerpo y lo trasladaron a la ciudad de Corrientes al IMF.

Detenida

La señora contratada para los quehaceres domésticos quedó inmediatamente detenida y alojada en la comisaría local en calidad de incomunicada y a disposición de la Justicia.

Los últimos momentos

Testigos comentaron ayer que  a doña Zulma la vieron por última  vez el viernes 14, cuando concurrió al banco a cobrar su jubilación. 

Auto misterioso

Vecinos comentaron que ese viernes a la noche vieron un auto, que sería un VW Gold Trend rojo. 
El conductor, al que no pudieron identificar, estacionó el coche  en una posición para cargar algo en el baúl. Al parecer la intención era cargar el cadáver, pero por motivos que no se saben no pudieron y optaron por desistir.
La policía reunió testimonios tratando de recomponer los últimos momentos de la vida de Zulma. 
Se buscó información para determinar con quién conversaba habitualmente, quién la visitaba. También se quiere saber si comentó alguna vez si alguien la amenazó o tenía problemas con algunos.
Trascendió que tenía el rostro desfigurado, pero no se sabe si fue por golpes o por el tiempo que llevaba enterrada. Presumen que la mataron en las últimas horas de la noche del viernes o las primeras horas de la madrugada del sábado. 
En el marco de las primeras conjeturas del crimen, los investigadores sospechan que quienes la mataron la habrían torturado para que revelara si tenía dinero guardado.
La policía requisó todo el inmueble y no encontró desorden. La mujer que hacía la limpieza se habría ocupado de dejar prolijas las habitaciones. 
También se supo que en su cartera no estaba el dinero que había cobrado de su jubilación, cuyo monto no trascendió. El caso está en plena investigación.