23/04/2024

Guzmán, en el Congreso: “Es hora de decirle nunca más a los ciclos de endeudamiento”



Foto: Cámara de Diputados de la Nación


Una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) debate desde este miércoles en Buenos Aires una reestructuración de la deuda argentina, planteada como indispensable por el presidente Alberto Fernández.
La misión dirigida por Julie Kozack y Luis Cubeddu es la primera del FMI que visita Argentina desde que Fernández asumió la Presidencia en diciembre pasado, en reemplazo de Mauricio Macri, quien en 2018 suscribió un acuerdo stand by por 57.000 millones de dólares.
Su estadía se extenderá hasta el 19 de febrero con reuniones a puerta cerrada “para continuar el diálogo sobre el programa económico del gobierno y las perspectivas económicas”, indicó un vocero del FMI en Washington.
Fernández sostiene que la deuda es impagable mientras el país –en recesión desde mediados de 2018, con una inflación anual de más de 50 %, fuerte depreciación monetaria y aumento de la pobreza y el desempleo– no recupere el crecimiento económico. Por ello, ha planteado una postergación de los pagos.
Del monto acordado con el FMI, Argentina recibió 44.000 millones y el presidente renunció a los siguientes tramos. El total a reperfilar con organismos multilaterales y bonistas privados es de 195.000 millones de dólares (57% del PIB).

Programa económico 

El ministro de Economía, Martín Guzmán, presentó este mismo miércoles ante el Congreso su plan fiscal y aseguró que “el país enfrenta una carga de deuda que le impide salir de la espiral recesiva”.
Guzmán ha tenido ya algunos encuentros con funcionarios del FMI, y Fernández hizo una gira por Europa para conseguir apoyos a su propuesta. Hasta ahora, el FMI y el Gobierno argentino se han declarado satisfechos de los intercambios.
“El cambio de conducción en el FMI ha sido en cierta medida refrescante. Aunque falta camino, hay un creciente entendimiento mutuo”, dijo Guzmán en su presentación ante el Congreso, al aludir a la nueva directora Kristalina Georgieva, que reemplazó a Christine Lagarde.
El ministro cuestionó sin embargo que no se tuviera en cuenta la sostenibilidad de la deuda y advirtió que en la actual crisis “tiene responsabilidad Argentina, tienen responsabilidad los bonistas y tiene responsabilidad el FMI”.
Unas 6.000 personas se manifestaron el miércoles frente al Congreso en Buenos Aires al compás de tambores y al grito de “¡Fuera Fondo!”, en rechazo a la llegada de misión del FMI.

El fantasma del default 

Argentina, que en 2001 declaró el cese de pagos por 100.000 millones de dólares y en 2014 se vio sometida al arbitraje internacional, lucha por alejarse del default. Hasta ahora, no ha caído en impagos, aunque la deuda con bonistas bajo legislación local fue reperfilada el año pasado durante el gobierno de Macri.
El martes, tras fracasar un intento de canje la semana anterior, el gobierno de Fernández anunció la postergación hasta el 30 de septiembre del pago de capital de un bono dual (con rendimiento atado a la evolución del tipo de cambio) que vencía este jueves.
El ministro de Economía advirtió en el Congreso que el Gobierno no va “a permitir que fondos de inversión extranjeros marquen la pauta de la política macroeconómica” y remarcó que, en el proceso de renegociación de la deuda externa, “la sociedad argentina está primero”.
Ante representantes de la CGT, los empresarios, la Iglesia, intendentes y funcionarios, Guzmán expuso durante poco más de una hora ante el plenario de la Cámara baja, trazó un panorama de la situación del país en relación con la deuda y habló de los desafíos a futuro pero aclaró que no iba a dar detalles públicos de la negociación.
El ministro habló en el marco de una sesión especial, ante un recinto casi a pleno –se registraron unas treinta ausencias– y en la que la mayoría de los bloques opositores tuvieron la posibilidad de formularle preguntas, más allá de las que le habían adelantado por escrito.
“Los detalles sobre la negociación no se adelantan para proteger a la sociedad argentina, y porque estamos en una negociación justamente”, dijo Guzmán al exponer el mismo día en que llegó al país una misión del FMI, que auditará las cuentas públicas y mantendrá diversas reuniones con funcionarios del Gobierno nacional.
Juntos por el Cambio, principal bancada opositora de Diputados, decidió concurrir al recinto para escuchar al ministro pero, en disconformidad con los tiempos asignados para preguntar, no participó de las preguntas posteriores a la primera exposición de Guzmán.

“Es hora de dar vuelta la página”

Pese a ello, el funcionario agradeció en más de una oportunidad a Juntos por el Cambio y al resto de los bloques opositores por el apoyo en la sanción de la ley de renegociación de la sostenibilidad de la deuda externa.
Preciso y enfático en su exposición, el ministro recibió el primer aplauso de la tarde cuando sentenció: “No vamos a permitir que fondos de inversión extranjeros marquen la pauta de la política macroeconómica”.
“Es hora de dar vuelta la página y decirle nunca más a los ciclos de endeudamiento. Hay que acabar con esto para vivir en una Argentina tranquila y con oportunidades”, aseveró y remarcó: “Nunca más a los ciclos de sobreendeudamiento. Nunca más a ciclos que destruyen oportunidades”.
Al trazar un panorama de la situación de país, el ministro dijo que “en los últimos 2 años, 465.000 argentinos entraron en situación de indigencia, y la pobreza aumentó del 28,6% al 35,4%”.
“El país tiene una carga de deuda insostenible. Esto es la consecuencia de un esquema económico que estuvo muy lejos de ser exitoso, el colapso de ese esquema”, dijo apuntando al gobierno anterior.
Además, recordó que “Argentina accede al mercado de crédito internacional en 2016 y se vende esta idea de la lluvia de inversiones y la realidad está a la vista: nada de esto ocurrió. Vino deuda pero nunca llegó la inversión productiva”.
“El horizonte que buscamos es consistencia macro económica, dinamismo, crecimiento e inclusión social”, adelantó Guzmán y consideró que “es condición necesaria para romper una dinámica de recesión que se profundiza, sacarse de encima esa carga de deuda que no se puede pagar”.
En su exposición, apuntó también contra el FM al señalar que “el préstamo más grande de la historia se utilizó para pagar deuda y para financiar la salida de capitales” y dijo que el organismo internacional “también es responsable de la crisis que la Argentina tiene”.

Presencias

Participaron de la exposición representantes de entidades sindicales, empresarias, de organizaciones no gubernamentales y de la Iglesia, intendentes y funcionarios de diversas áreas.
Dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), la Confederación General Empresaria, la Unión Industrial Argentina, Apyme, ABA, Adeba y CAME ocuparonn los palcos del recinto de la Cámara baja.
Asimismo, los ministros de Desarrollo Social, Daniel Arroyo; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Trabajo, Claudio Moroni; de Agricultura, Luis Basterra; y de Transporte, Mario Meoni, llegaron hasta el Congreso para acompañar la exposición de su par del gabinete.
Intendentes y rectores universitarios también participaron de la sesión, al igual que el director y presidente de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Buenos Aires, el padre Carlos Accaputo, y las principales autoridades del Banco Central, la AFIP y la Comisión Nacional de Valores.

Con información de AFP y Télam