29/03/2024

El crimen de Germán Lugo: el abogado del acusado dice que las pruebas para inculparlo son “insuficientes”

Martín Ríos, a cargo de la defensa de Jonathan Aquino (19), internado detenido, sostuvo que “los elementos reunidos carecen de sustento”.



El martes 15, la Justicia dispuso la detención de Jonathan Ramón Aquino (18), alias Cachete. Lo vinculan con el asesinato a balazos de Germán Luis Lugo (18), alias Cheo, que ocurrió en la madrugada del 6 de enero. 
Aquino se recupera en el hospital Escuela. Resultó herido por disparos de arma de fuego en la noche de ese domingo. Desde ese martes está internado con custodia policial.
Su abogado, Martín Ríos, en declaraciones a radio Sudamericana, dijo ayer que “no hay pruebas concretas para relacionar a Jonathan con el crimen de Lugo”.
Indicó que “solamente surgieron algunos indicios por testimonios. Pero carecen de sustento. La policía dijo que Jonathan evitó un control y, en la persecución, efectuó disparos, que fueron repelidos por los agentes”.
Agregó que “en los procedimientos realizados se secuestró el auto, un VW Gol que manejaba esa noche. No se incautó ninguna  arma”.
Recordó que “se secuestró una moto, pero ese rodado no está vinculado a mi cliente”.
Ríos insistió en que “en la investigación en curso, hay testimonios  que exponen una aproximación de lo que pudo haber ocurrido. Las pruebas son muy débiles, son insuficientes. Nada concreto”.
Por el momento, la prensa no tuvo acceso a las evidencias reunidas por la Justicia para sostener los cargos contra Aquino, el único detenido en la causa. Se esperan resultados de peritajes.
              
Disparos y muerte

No hay precisiones sobre los motivos del asesinato de Germán Luis Lugo. Solo hay versiones. 
En la madrugada del domingo 6 de enero, cerca de las 2, Lugo conducía un Fiat Palio llevando como acompañante a un amigo, de apellido Zamudio. 
En momentos en que transitaban por la avenida Presidente Frondizi, a la altura del 3400 aproximadamente, en inmediaciones del Jardín Botánico, en el barrio Ingeniero Serantes, frente al sector llamado La Olla, fueron alcanzados por al menos cuatro muchachos que se movilizaban en motos y uno de ellos efectuó varios disparos con una pistola calibre 9 mm. Lugo recibió un balazo en la cabeza y murió, en tanto que Zamudio resultó ileso. Por la noche, de ese domingo, un joven resultó herido de gravedad por disparos de arma de fuego de grueso calibre. 
La información que llegó a la prensa señala que Jonathan Aquino (19) manejaba un VW Gol gris. Una patrulla de la División Antiarrebato habría tratado de identificarlo, pero el automovilista siguió la marcha iniciándose la persecución. La policía dijo que el conductor efectuó disparos, que fueron repelidos por los agentes.
María Duré, madre de Jonathan, narró a la prensa que esa noche su hijo llegó ensangrentado y apenas pudo bajar del auto, al tiempo que arribaron varios hombres de civil, que dijeron que eran policías y pedían que entregaran al muchacho.
La mujer recordó que su hijo, antes de desvanecerse, alcanzó a manifestarle que fueron los de la Brigada los que lo habían herido. Más tarde, el joven fue trasladado al hospital Escuela, donde se recupera.
Por otra parte, la Justicia secuestró las armas de los policías y el auto del joven. Vinculan a Aquino con el ataque a Lugo.