El crimen de Atilio Güenaga: Casación dejó firme la absolución del imputado
Se rechazó el recurso que había presentado el fiscal contra la sentencia del TOP de Mercedes, que liberó al acusado por insuficiencia probatoria.
El homicidio del productor ganadero Ramón Atilio Güenaga (80) se mantiene impune.
Casación rechazó el recurso que había presentado el fiscal del juicio Juan Carlos Alegre, junto con el querellante, el abogado Aníbal Alonso, contra la sentencia del Tribunal Oral Penal de Mercedes, que el 2 de diciembre de 2015 absolvió al único imputado, Gabriel Cantero, por insuficiencia probatoria, quedando de esa manera desvinculado del caso.
La causa fue caratulada como “homicidio en ocasión de robo y lesiones graves en concurso ideal”.
El planteo
El fiscal Alegre y Alonso, en su presentación, consideraron, entre otros aspectos, que el Tribunal de Mercedes no tuvo en cuenta estos detalles: a) muerte de perros de la estancia Flor de María en manos de Canteros días previos al hecho; b) llamado realizado por Canteros a Alejandra Flores la tarde previa al homicidio y robo, donde le expresa a la misma: ‘mañana vas a tener novedades’, siendo Flores la primera en recibir la noticia el 17 de agosto de 2011 a las 6.10 según informe Nº 156/13 de fojas 840 (refoliado 831) de la División Informática Forense; c) conversación de Canteros tiempo antes del hecho respecto de su intención de hacerse una casa en el potrero 17 de la estancia Flor de María; d) la manifestación de Canteros de que, cuando el matrimonio Güenaga muriera, él continuaría trabajando en la estancia; d) que Canteros cuidaría de las hijas de Alejandra Flores, nuera del matrimonio Güenaga, siendo ello corroborado por la declaración de fojas 1.298 realizada por la testigo Flores; f) testimonio de Margarita Isabel Farinón, quien no dudó en lo que hace a la presencia de Canteros al momento de sufrir la agresión a fojas 1.255/1.259 y 1.418 y vuelta; g) la especial relación de Canteros con Alejandra Flores conforme surge de los testimonios de Isabel Farinón a fojas 1.257, de Luis Ricardo Marticorena a fojas 1.302, de Vanina Soledad Salas a fojas 1.305, de Marcelo Rafael Domínguez, los informes forenses de equipos celulares obrantes a fojas 114, la actitud sospechosa de Canteros luego del hecho conforme surge del informe de foja 219 y del testimonio de Ricardo Marticorena a foja 1.301 y de la declaración brindada en debate por Jorge Gregorio Medina
Alegre y Alonso remarcaron que “el Tribunal se equivoca cuando sostiene que se pretende imputar a Canteros solo basado en indicios y deducciones”.
El rechazo
El Superior Tribunal de Justicia rechazó el recurso de Casación señalando, entre otros aspectos, que “del análisis de la sentencia, se puede apreciar que el tribunal de juicio se basó en pruebas legalmente incorporadas y el razonamiento efectuado para arribar a la sentencia fue correcto conforme a la sana crítica racional, no advirtiéndose vicios que la invaliden, más bien se aprecia una reedición de agravios en esta etapa recursiva de los argumentos ya expuestos anteriormente, las que solventemente fueron respondidas por el Tribunal en su decisión, debiendo ser confirmada”.
Agrega que “en consecuencia, la sentencia no es arbitraria como lo pretende el fiscal del juicio y la querella, pues el razonamiento deducido de las pruebas, surge de lo que está plasmado, reflejando una derivación razonada de ellas. Por ello, este tribunal ha expresado que la sentencia es considerada como una unidad jurídica que debe reposar en una motivación lógica”.
El crimen
El 17 de agosto de 2011 mataron a garrotazos a Ramón Atilio Güenaga (80) e hirieron de gravedad a su esposa, Isabel Farinón (67). Durante el hecho se llevaron un mueble construido con madera de algarrobo, que no pudieron abrir.
Allí había una caja fuerte metálica, donde la víctima tenía unos $150.000 producto de la venta de ganado.
El crimen se produjo en la estancia “Flor de María”, ubicada en la cuarta sección paraje Ávalos, distante a unos 70 kilómetros de Curuzú Cuatiá.
Atilio Güenaga era tío de Juancito Güenaga, acordeonista, autor y compositor chamamecero, también nacido y criado en Curuzú Cuatiá.