Las acusadas de matar al penitenciario se abstuvieron de declarar
Las dos mujeres detenidas por el crimen del cabo 1º del Servicio Penitenciario Provincial (SPP) Gabriel Tichellio (32) no declararon por recomendación de sus abogados. Los profesionales quieren tener acceso al expediente para avanzar en la defensa.
Lorena Encinas, la esposa de la víctima, y Miriam Jara, su amiga, concurrieron en la mañana de ayer al Juzgado de Instrucción Nº 2.
La defensora oficial Patricia Barbis, que representa a Jara, sostuvo que “aconsejé a la detenida a que haga el uso del derecho de abstenerse. No se negó. Lo puede hacer más adelante en el avance de la instrucción”.
Por su parte, el abogado Pablo Soda, que atiende a Encinas, comentó que “ella fue citada a indagatoria, pero le sugerí que no declare hasta tanto no acceda al expediente”.
El crimen
El homicidio de Gabriel Tichellio (32), cabo 1º del Servicio Penitenciario Provincial (SPP), tiene aristas pasionales. Están detenidas su esposa y una amiga. Ocurrió en la tarde del 26 de julio en su domicilio del barrio Laguna Seca. Lo mataron con golpes en la cabeza utilizando un mazo.
En allanamientos a la vivienda de la víctima y en el sector donde dejaron el vehículo con el cuerpo, incautaron el mazo, guantes, una frazada y ropas con manchas de sangre.
En la investigación se estableció que el suboficial habría sido asesinado en su casa.
Luego, lo colocaron en un vehículo y lo llevaron a un lugar distante donde lo abandonaron en el vehículo. Tichellio era casado y dejó tres hijos, que tienen 9, 7 y 5 años. Se desempeñaba como albañil en la Unidad de Trabajo del Servicio Penitenciario Provincial (SPP).
En la mañana del jueves 26, estuvo en la Jefatura del SPP, en sala de monitoreo de funciones electrónicas. Se retiró en su horario habitual de las 13.30. Pero a la tarde no regresó a sus funciones.
La preocupación comenzó a crecer cuando su familiares advirtieron la demora de regreso a su casa y su teléfono celular no respondía.
Una hermana se comunicó en dos oportunidades con la jefatura del SPP buscando novedades sobre su paradero.
Cerca de las 23 de ese jueves, alertaron a la policía de que en una camioneta Renault Kangoo había un hombre sin vida. Una patrulla de la comisaría 14ª concurrió a la avenida Maipú a la altura del kilómetro 8 y a unos 300 metros de las vías del ferrocarril y constató el hecho.
En la inspección ocular, los agentes advirtieron que la víctima tenía lesiones en la cabeza. Con el correr de los minutos se determinó que era un agente penitenciario.
Al avanzar la investigación y en el interrogatorio a la esposa, la mujer se quebró ante la policía y contó lo que había ocurrido vinculando al crimen a su amiga, Jara. Después se supo que ambas mantenían una relación sentimental.
Juicio por el feminicidio de Rita Sánchez
Se inició ayer, en el Tribunal Oral Penal de Goya, el juicio a Julio Segovia, único imputado por el crimen de Rita Sánchez, hecho que ocurrió en agosto de 2016 en Esquina.
El acuso expuso ante el tribunal y posteriormente declararon cinco testigos.
El tribunal es presidido por Julio Ángel Duarte, secundado por los vocales José Luis Acosta y Gertrudis Márquez. En el Ministerio Público Fiscal se desempeña Guillermo Barry.
Sánchez fue asesinada el viernes 19 de agosto de 2016, cerca de las 7.30, en un domicilio del barrio 80 viviendas de Esquina.
Según la acusación, Segovia atacó a Sánchez con un cuchillo y a tiros. La víctima recibió dos impactos en la cabeza. Después de recibir los primeros auxilios en el hospital local, la derivaron al Hospital Zonal “Camilo Muniagurria”, de Goya, pero dejó de existir antes de llegar.
