Se copó el Pincha y Vélez rescató un empate
Estudiantes le ganó 2-0 a Unión y quedó en zona de clasificación a la Libertadores. Los del Fortin por su parte sacaron un empate agónico ante Belgrano de Córdoba.
Los números de Estudiantes en el 2018 son de pelear el campeonato: diez sobre doce. El Pincha de Bernardi ratificó su buen momento en cuanto a resultados con el 2 a 0 a Unión, un Tate que sufre desde que el colombiano Cabezas lesionó a Lucas Gamba: los santafesinos no volvieron a marcar un gol pese a que estaban instalados como uno de los equipos revelaciones de la Superliga.
Unión quedó fuera de la zona de clasificación a la Libertadores al mismo tiempo que se instaló Estudiantes con la victoria. El Pincha en el primer tiempo casi no tuvo capacidad elaborativa y ni asustó al Tate. Su rival estuvo en la misma mediocridad. Hubo imprecisiones y distracciones.
La evolución fue en el segundo tiempo, poco después de que Andújar con una buena reacción había evitado un gol en contra. Se puso en órbita Gastón Giménez, el Pincha empezó a dominar la mitad de la cancha, no siempre con buena distribución, y Melano facturó el 1 a 0 en un gol que generó una sensación comprobada después: Unión, impotente, estaba destinado a perder.
El 2 a 0 fue una jugada no habitual: un pase largo y frontal, de más de 80 metros de Schunke, tomó por sorpresa, también por una carga de ingenuidad, al fondo del Tate y el colombiano Otero capitalizó la ventaja.
No está muerto quien pelea
Vélez no atraviesa un presente para nada cómodo en su lucha por la permanencia y, aunque todavía tiene un buen colchón de puntos que lo separan de la zona roja, no puede regalar nada. Por eso, el empate agónico 2-2 en Córdoba contra Belgrano vale más que un punto. Significa que el equipo de Heinze volvió a sumar luego de dos fechas.
La historia arrancó cuesta arriba. Todavía se estaban acomodando y Vélez ya caía. Torsiglieri lo agarró a Lema en el área y Lamolina no dudó: penal. Suárez lo cambió por gol y la noche se ennegreció temprano para el Fortín. Sin embargo, apareció Mauro Zárate para rescatarlo y poner el empate. El tema es que el crack de Liniers después las quiso hacer todas para él, cuando muchas era para buscar a un compañero.
Vélez tuvo dos muy claras para pasar al frente. Una de Mainero y otra del propio Zárate, pero ambos se toparon con el bueno de Acosta bajo los tres palos piratas. Y cuando la visita iba a buscar el triunfo, Suárez lo agarró mal parado y no lo perdonó. Doblete para él.
Parecía que Belgrano se quedaba con los tres puntos, pero Vélez siguió yendo y tuvo premio en la última, en una jugada que Acosta despejó a medias y que terminó enganchando el pibe Bouzat para estampar el 2-2 definitivo.
